El lema del Congreso Internacional de Dietistas del 2016 ha sido “Going to sustainable eating”, “Hacia una alimentación sostenible” el protagonista de este, el MEDIO AMBIENTE, al ser la cadena de producción de alimentos una de las más contaminantes a nivel mundial. Uno de los objetivo que tenemos los Dietistas-Nutricionistas y Tecnólogos de los alimentos es promover un sistema de producción y alimentación sostenible.

La PRODUCCIÓN INTENSIVA en agricultura, ganadería, pesca… provoca diversos cambios en nuestros suelos y medio ambiente, os pondré el ejemplo de nuestros campos de olivos, los cuales hemos limpiado y dejado como una patena durante décadas, quitando las famosas “Malas hierbas”; pero estas aumentan los nutrientes de la tierra, tienen raíces que ayudan a proteger de la erosión y pérdida del suelo.

Además hemos abusado a nivel mundial de compuestos químicos cuyo origen se da en las dos Guerras Mundiales, muchas de las industrias químicas buscaron nuevos mercados, entre ellos la agricultura creando los pesticidas; estas empresas son los padres de la agricultura química, la cual provoca pérdidas de polinizadores naturales, contaminación del agua, suelo… Existen los alimentos ecológicos pero hoy día son una minoría, tendríamos que aprender de estos productores ecológicos para evitar el uso de tantos productos químicos no aptos para el consumo humano, técnicas de cultivo sostenibles y que respeten el medio ambiente.

Las condiciones meteorológicas adversas como las sequías y una mala gestión forestal provoca además de otras muchas causas que nuestros bosques sean una zona favorable para el fuego, todos los veranos sufrimos diversos incendios forestales y desertización.

LA INDUSTRIA ALIMENTARIA es una de las que más contaminan nuestro medio ambiente y provocan daños en nuestra capa de ozono. Las consecuencias de esta pérdida es el deshielo de los polos, crecimiento del nivel del agua del mar, debido al aumento de la temperatura que si prosigue en el futuro entonces provocará la evaporización de parte del agua del planeta; provocando a largo plazo falta de agua en muchas zonas. En el Congreso internacional de Dietistas del 2016 #ICD2016 se comentó que el agua es el “Oro líquido o el Oro Azul del siglo XXI” si seguimos así.

Para llevar una ALIMENTACIÓN SOSTENIBLE es esencial comprar productos frescos, de temporada y saludables a ser posible a nivel local o nacional; para ello TODOS podemos colaborar desde nuestro hogar y poner nuestro granito de arena, además esta acción promueve la economía local y nacional; esencial para afrontar esta crisis económica. Cuando compramos productos que requieren transportes más largos conlleva un coste medioambiental.

Además los alimentos procesados industrialmente están invadiendo muchos de los hogares en nuestro país, dejando de lado a los alimentos frescos, las recetas tradicionales, cocinar en casa…; se aconseja consumir alimentos con menos embalaje, la pregunta es ¿Cocino en casa o compro el bote?. Esto también provoca daños medioambientales, encabeza la lista la industria cárnica la cual utiliza una gran cantidad del agua disponible en sus procesos industriales.

Actualmente sabemos que estamos consumiendo en exceso alimentos proteicos, grasos, con azúcares añadidos en nuestra dieta, alejándonos de nuestra Dieta Mediterránea, necesitamos recuperarla y con ella parte de nuestra “Cultura”. En ella se les da gran importancia a los alimentos del campo como las legumbres, cereales, verduras, hortalizas, frutas… por eso es una dieta sostenible, los alimentos de origen vegetal necesitan menos recursos hídricos, generan menos gases de efecto invernadero… además generalmente una hectárea de cultivo vegetal da de comer a más personas que la misma tierra destinada a la producción animal.

No hay que ser drásticos, es decir, el consejo nutricional es “Menos industria alimentaria y más fogón de casa”. Adquirir productos locales más frescos los cuales han viajado menos que otros, llegan antes a nuestros hogares, duran más tiempo… si además son de temporada nos costarán más baratos y se cumplirá lo anterior. También disponemos de diversas recetas tradicionales algunas de ellas muy útiles para aprovechar las sobras de alimentos, por ejemplo a partir del cocido se puede obtener ropa vieja, croquetas, sopa…; con el pan duro sobrante migas, pan rallado, salsas…

Según la FAO un tercio de los alimentos que se producen cada año terminan en el cubo de la basura. Este DESPERDICIO ALIMENTARIO suele darse en los países industrializados. En España aproximadamente el 40% del despilfarro proviene de los hogares, cada español tira unos 250 euros anuales en comida según “Save Food”; por tanto en este apartado TODOS podemos colaborar diariamente. Cuando vamos a comprar deberíamos previamente realizar una lista de la compra por el simple hecho de adquirir aquellos artículos que de verdad se necesitan sin que entren en la cesta otros superfluos. Leer las etiquetas para elegir los más apropiados; realizar compras a granel para así adecuar las cantidades a nuestras necesidades… En casa cuidado con las raciones de los alimentos estamos comiendo de más y hay que comer menos, organizar la nevera, congelador, despensa…, guardar los alimentos correctamente.

Hoy día la obtención y procesado de los alimentos provocan daños medio ambientales irreparables, por eso se necesita un “DESARROLLO SOSTENIBLE”, así que para comer hoy estamos acabando con los recursos del mañana, actualmente no somos un planeta sostenible, y si algo no se sostiene se cae. El Tema de reflexión es ¿Realizamos una “Alimentación sostenible en casa”?