El ambiente cofrade no cesó en el segundo día de la Semana Santa linarense 2016. La Real Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús en la Oración en el Huerto y Nuestra Santísima Madre y Señora de Gracia asistió fiel a su cita con la población local, gracias a que la meteorología dio tregua y, finalmente, no llovió, contradiciendo así a las previsiones climáticas. Por ello, la ciudadanía pudo disfrutar de la belleza, el colorido y el esplendor que desprendió, por las calles, la hermandad del Señor orante.
Fue a las cinco en punto de la tarde cuando se abrió, de par en par, la puerta principal de la iglesia de Santa María la Mayor. En ese momento, tras la plateada Cruz de Guía, flanqueada por sus dos faroles de acompañamiento, comenzaron a desfilar los numerosos nazarenos de luz que forman parte del cortejo procesional de la Oración en el Huerto. Una hermandad que crece, exponencialmente, en número de componentes, siendo una de las que más costaleros tiene en su haber, así como también tiene gran cantidad de niños y jóvenes.
Como es habitual, fueron muchas las personas que acompañaron el cortejo procesional durante todo su recorrido, desde la salida hasta la emblemática subida de la «cuesta» de Santa María, destacando otros puntos como el paso de la procesión por la calle El Pilar -donde se produjo el encuentro con las Hermanas de la Cruz para cantar a las dos imágenes titulares de la cofradía-, la Carrera Oficial de la calle Isaac Peral (que presentó muy buen aspecto de público) o la Plaza de San Francisco, entre otros.
Tras el paso de misterio, que fue llevado con maestría por su cuadrilla de costaleros, siendo dirigido por el capataz, Isacio Ocaña, sonaron las bellas marchas de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús de la Pasión. De igual forma, con grandes dosis de fe y devoción, los costaleros de la Virgen de Gracia llevaron a la Señora hasta la gloria, bajo las directrices de José Manuel Ocaña y el acompañamiento musical de la Sociedad Filarmónica María Inmaculada.
Este Lunes Santo fue un tanto «especial» para todos los integrantes de la Oración en el Huerto. Y es que su joven vocal de Cultos, Rocío Ceacero Heras, fallecía recientemente, razón por la cual su fotografía apareció en una tulipa de uno de los candelabros del paso del Señor, al igual que en la candelería del palio. También se colocó, en ambos pasos, un crespón negro en señal de luto por tan triste e injusta pérdida.